miércoles, 22 de diciembre de 2010
Ornitomancia
Y quizá me niegues
A lo lejos el canto del gallo entristece las horas,
el cielo se oscurece y amenaza tormenta,
deseo oler tu cuerpo en la tierra mojada
pero el gallo canta tres veces y la tarde se quiebra,
y quizá no vengas,
y quizá me niegues...
Alea jacta est
La suerte de nuestro amor está echada
Comenzó con las migraciones de las ocas
Como las aves, nuestros corazones vienen del frío,
como los corazones, las aves buscan costas más cálidas.
Nuestro destino, como el de las ocas, siempre estará unido a la incógnita.
Aleteo de las golondrinas
Mientras espero
las golondrinas aletean sobre el tejado de paja.
Presagio que nuestro amor irá a más.
Elena Soto
Etiquetas:
Elena Soto poema
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2 comentarios:
Pájaros como piezas de orfebrería.
Me gusta esa resonancia oriental de los tres poemas.
Saludos
Pues me alegro porque la poesía oriental me encanta.
Un saludo.
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