/ El establo de Pegaso: septiembre 2022

domingo, 25 de septiembre de 2022

Miroslav Holub, poemas

 


En el microscopio

También aquí hay paisajes de ensueño,
lunares, abandonados.
También aquí están las masas
trabajadoras de la tierra.
Y las células, combatientes
que dan su vida
por una canción.
Aquí también hay cementerios,
la fama y la nieve.
Y oigo murmullos
la revuelta de grandes estados.

Miroslav Holub (Pilsen, República Checa, 1923- Praga, 1998)

In the Microscope

Here too are dreaming landscapes,
lunar, derelict.
Here too are the masses
tillers of the soil.
And cells, fighters
who lay down their lives
for a song.
Here too are cemeteries,
fame and snow.
And I hear murmuring,
the revolt of immense estates.

Miroslav Holub. Selected Poems, PENGUIN MODERN EUROPEAN POETS / Advisory Editor: A. Alvarez

El cabo que mató a Arquímedes

Con un solo golpe audaz
mató el círculo, la tangente
y el punto de intersección
en el infinito.

Bajo pena de
de descuartizamiento
prohibió los números
del tres en adelante.

Ahora en Siracusa
dirige una escuela de filósofos
durante otros mil años
se pone en cuclillas sobre su alabarda
y escribe:

uno dos
uno dos
uno dos
uno dos

The Corporal Who Killed Archimedes

With one bold stroke
he killed the circle, tangent
and point of intersection
in infinity.

On penalty
of quartering
he banned numbers
from three up.

Now in Syracuse
he leads a school of philosophers
for another thousand years
squats on his halberd
and writes:

one two
one two
one two
one two

Miroslav Holub, Poems Before & After: Collected English Translations

Alas

“Tenemos
la microscópica anatomía
de la ballena
esto
da
al hombre
seguridad”.
William Carlos Williams

Tenemos
un mapa del universo
para los microbios,
tenemos
un mapa de un microbio
para el universo.
Tenemos
un Gran Maestro de ajedrez
hecho de circuitos electrónicos.
Pero sobre todo
tenemos
la habilidad
de clasificar guisantes,
de tomar el agua en nuestras manos,
de buscar
el tornillo correcto
bajo el sofá
durante horas
Esto
nos da
alas.

Křídla

Máme
mikroskopickou
anatomii
velryby
to
člověku
dodává
jistoty
WILLIAM CARLOS WILLIAMS

Máme
mapu vesmíru
pro mikroby,
máme
mapu mikroba
pro vesmír.
Máme
velmistra šachu
z elektronek.
Ale hlavně
máme sílu
přebírat hrách,
přenášet vodu v dlaních,
hodiny hledat
ten pravý šroubek
pod otomanem —
To
dává
křídla.

Miroslav Holub, Slabikář, texto se basa en el Silabario publicado por la editorial Československý spisovatel de Praga en 1965.

El científico y poeta Miroslav Holub nació en Plzeň, ciudad de la actual República Checa. Se licenció en medicina en 1953 y se doctoró en el Instituto de Microbiología de la Academia Checa de Ciencias en 1958.

Patólogo clínico e inmunólogo, Holub dio prioridad a su profesión de científico. En una entrevista con Stephen Stepanchev, le dijo que la Unión de Escritores Checos le había ofrecido una paga equivalente a su salario como investigador científico para que pudiera dedicarse a la poesía durante dos años. "Pero me gusta la ciencia", dijo. "De todos modos, me temo que, si tuviera todo el tiempo del mundo para escribir  poemas, no escribiría nada". Holub comentó a Stepanchev que, para él, la ciencia y la poesía mantienen una "relación incómoda". "En los círculos científicos", dijo, "intento ocultar el hecho de que escribo versos. Los científicos tienden a desconfiar de los poetas; sienten que los poetas son, de alguna manera, irresponsables". Y admitió que su profesión también era considerada sospechosa por sus amigos literatos. Pero Holub no ve ningún conflicto real entre la ciencia y la poesía. Como científico, dice, cree en "una realidad objetiva" y odia la superstición. Pero, añade, "tengo la mente abierta a todos los fenómenos de la experiencia, incluido lo irracional".

Holub emplea a menudo metáforas científicas en sus poemas, una técnica que, aunque la considera "un riesgo", le permite "encontrar equivalentes poéticos para la nueva realidad del micromundo". Holub dijo a Stepanchev que una de las razones por las que utiliza metáforas es "para evitar las arideces del racionalismo". "La otra razón", añade, "es que me gusta el juego o la danza de las metáforas, igual que me gusta el juego de ideas en un poema. Mis poemas, por cierto, siempre comienzan con una idea, una idea obsesiva de algún tipo. ... Intento conseguir efectos de suspense con mis líneas largas y tremendos énfasis con las cortas".

Holub murió en Praga en 1998.

Texto sobre Miroslav Holub tomado de la web Poetry Foundation