/ El establo de Pegaso: Dos poemas de Andrei Voznesensky

martes, 22 de junio de 2010

Dos poemas de Andrei Voznesensky

No olvides




En alguna parte un hombre se pone sus cortos,
su camisilla azul de listas,
sus jeans;
un hombre se pone
su chaqueta en la que hay un botón
que dice COUNTRY FIRST,
y sobre su chaqueta, su sobretodo.
Sobre su sobretodo,
tras desempolvarlo, se pone su automóvil,
y sobre éste se pone su garaje
(apenas justo para su carro),
sobre éste el patio de su apartamento,
y luego se asegura él mismo contra el muro del patio.
Entonces se pone a su esposa,
y después de ésta la próxima,
y luego la próxima,
y sobre esa se pone su subdivisión
y sobre esa su condado
y como un caballero se abrocha
las fronteras de su país;
y con su testa oscilando,
se coloca el globo completo.

Entonces viste el negro cosmos
y se abotona con las estrellas.
Cuelga la vía láctea sobre un hombro,
y tras ésta algún secreto más allá.

Mira en rededor:
De súbito
en la vecindad de la constelación de Libra
recuerda que olvidó su reloj.
Su tic-tac debe estar sonando en algún sitio
(Por si solo)
El hombre se quita los países,
el mar,
los océanos,
el automóvil, y el sobretodo.
Él no es nada sin el Tiempo.

Desnudo permanece en su balcón
y grita a los transeúntes:
“Por amor de Dios, no olviden su reloj!”


Yo soy Goya





Yo soy Goya
del campo yermo, excavado por el pico de escoplo del enemigo
hasta que los cráteres de mis ojos se abran
Estoy triste

Soy la lengua
de la guerra, las ascuas de ciudades,
sobre la nieve del año 1941
Estoy hambriento
Soy el gaznate
de una mujer colgada cuyo cuerpo como una campana
oscilaba sobre una plaza desierta
Yo soy Goya

¡Oh uvas de la ira!
¡He lanzado hacia el oeste

las cenizas del visitante no invitado!
y como clavos martillé estrellas entre el memorioso firmamento
Yo soy Goya

Andrei Voznesensky (Moscú 1933-2010)
Memoria del Festival de Poesía de Medellín

3 comentarios:

Luz dijo...

No olvides, maravilloso poema! Borges decía: "Negar la sucesión temporal, negar el yo, negar el universo astronómico, son desesperaciones aparentes y consuelos secretos. Nuestro destino (a diferencia del infierno de Swedenborg y del infierno de la mitología tibetana) no es espantoso por irreal; es espantoso porque es irreversible y de hierro. El tiempo es la sustancia de que estoy hecho. El tiempo es un río que me arrebata, pero yo soy el río; es un tigre que me destroza, pero yo soy el tigre; es un fuego que me consume, pero yo soy el fuego. El mundo, desgraciadamente, es real; yo, desgraciadamente, soy Borges." (de Otras inquisiciones: Nueva refutación del tiempo)

Establo Pegaso dijo...

Gracias Luz, por recordarme escritos de Borges, este fragmento, en concreto, es genial, y ni me acordaba de él. A mi me sorprendió mucho cuando leí Otras Inquisiciones y con algunas de sus opiniones sobre autores estaba en desacuerdo. Pero a gracias a su lectura conocí a Swedenborg (tipo particular donde los haya). Así que a lo mejor es un buen momento para releerlo.
Como dirían los portugueses,
OBRIGADA

VzC dijo...

De quien habla el poema? Del paso del tiempo? O del destino tal vez?