/ El establo de Pegaso: octubre 2011

viernes, 28 de octubre de 2011

Chico Ostra sale de casa



Chico Ostra sale de casa
El día de Hallowen,
Chico Ostra decidió disfrazarse de humano.

Oyster Boy steps out
For Halloween,
Oyster Boy decided to go as a human.

Tim Burton

"The Melancholy Death of Oyster Boy" La melancólica muerte de Chico Ostra

miércoles, 19 de octubre de 2011

Las primeras imágenes del ALMA



Las primeras imágenes del ALMA (Atacama Large Millimeter Array)

Espirales tejidas con alas de libélula y mariposa Morpho
Las primeras imágenes del ALMA,
escamas frágiles de polvo en la memoria del Universo,
se desprenden
y atraviesan regiones tenebrosas
al latido de 16.000 millones de millones por segundo.
El firmamento también fue un niño frágil
apenas reconocemos su carita de antaño
en la Gran Nube de Magallanes o en la galaxia de Andrómeda.
Quizá sea consciente de que va hacia el gran desgarramiento
olvidando que en la infancia temió a la energía oscura.


Atacama Large Millimeter/submillimeter Array, ALMA

El proyecto está siendo construido en el llano de Chajnantor, a 5.000 m de altitud, en el desierto de Atacama, zona norte de Chile. ALMA revolucionará la astronomía moderna al permitirnos vislumbrar la formación de las estrellas en los albores del Universo y obtener imágenes extremadamente detalladas de estrellas y planetas en proceso de nacimiento.

miércoles, 12 de octubre de 2011

El tigre del Guadarrama de Vainica Doble



El tigre del Guadarrama




Rodé haciendo la croqueta
por una larga pendiente alegremente,
consciente de que mi meta
era al fin hallar la muerte.

Se abrazaron los helechos a mi pecho
obstáculo ligero a lo inminente.
Por si acaso, a mi paso y con los dientes,
iba arrancando setas,
eligiendo cuidadosa
aquellas más venenosas:
las amanitas faloides,
las amanitas virosas.

Varias veces dio mi frente
contra el duro granito jaspeado
disfrazado con verde sombrerito
de musgo floreado
apariencia inocente
que oculta cuarzo, mica y fesdelpato
(también perdí un zapato)

Luego, de bruces,
fui a dar en el arroyo
"ploc, ploc, ploc",
alegres montañeros federados
entonaban los aires del Tirol:
"iulereiriu. iulereiruiuuuuuuuu...".

Cegáronme las luces
que pone el sol en lomos de bermejas
humildes pececillos de secano;
la campana del pueblo más cercano
convocaba a las viejas.

Todo el arroyo serrano
se introdujo por mi boca de repente;
colgado de una roca,
un barbo me observaba indiferente.

Recibí la visita del milano,
del buitre carroñero
y su hermano menor don Alimoche,
rapaces en sus gustos muy exigentes.

Me aliñaron con exceso
tomillo, salvia y cantueso;
luego en mi se hizo la noche.

Un dominguero cantaba una canción
mientras lavaba el coche.

Antares del Escorpión
me hacía guiños rojizos,
la Polar me reclamaba
a la región de los fríos.

Del fuego del corazón
huía la débil llama,
yo no entendía porqué
dormía en el río aquél
sin camisón ni pijama.

El Tigre del Guadarrama
Silencioso y a paso lento, lento
Se acercó hasta mí
Husmeando el viento

Y bebió de la corriente en mi cama
En reposo, suavemente
Y luego se alejó, con sumo tiento,
Blandas zarpas de algodón en rama

Yo no le vi
pero sentí su aliento.

Tema del disco El tigre del Guadarrama, 1981, de Vainica Doble, dúo formado por Carmen Santonja y Gloria Van Aerssen.

sábado, 1 de octubre de 2011

Ledo Ivo




Las luces del aeroùerto corren como arlequines

En los pasos a nivel, silban los trenes de carga
llevando los maniquíes que abastecen los sueños.

Y yo soy lo que parte. Y queda. Y vuela. Y permanece.
Una luz de faro divide el universo.
Mi mano busca en lo oscuro un cuerpo nupcial.

Lamo la sal sigilosa de las conchas entreabiertas.
El silencio detenido entre raíces y lianas
abre una senda solar en un acueducto.

El bochorno sostiene la claridad.
El día es un relámpago despedazado.
Un cono de sombra me esconde de mí mismo.

Y el día pasa como una hormiga. Los días pasan
como la brisa entre velas desplegadas.
Los días pasan y traen siempre la muerte.

Digo adiós a mí mismo en la víspera de la tiniebla.
Y ahora la noche desciende. Trae la causa perdida.
Mi mano ya no toca el cuerpo bienamado.

Un sol negro ilumina la noche de mi alma
pero yo quiero otro sol, la intensa claridad
del día material que se abre como una puerta.

Sólo me siento completo con mi sombra
y la máscara de todo lo que dejé de ser.
Mi sol inhabitable nace en cualquier horizonte.

Sólo al viento que sopla le confío mi espanto.
Preciso ser exacto e impenetrable
Para ser entendido por el día que pasa.

Un vuelo de gavilán acompaña mis pasos
en dirección a la vida, en dirección a la muerte,
bajo la indiferencia de un sol inextinguible.

Veo la muerte oculta en un rayo de sol:
sobra del arrebol, nido de ningún pájaro
y abolición del vuelo sobre cualquier páramo.

Poema de Réquiem de Lêdo Ivo. Premio Casa de las Américas 2009.

Los pobres en la estación de autobuses

Los pobres viajan. En la estación de autobuses
levantan los pescuezos como gansos para
.........mirar
los letreros del autobús. Sus miradas
son de quien teme perder alguna cosa:
la maleta que guarda un radio de pilas y una
.........chaqueta
que tiene el color del frío en un día sin
.........sueños,
el sandwich de mortadela en el fondo de la
.........mochila,
y el sol del suburbio y polvo más allá de los
.........viaductos.
Entre el rumor de los alto-parlantes y el
.........traqueteo de los autobuses
temen perder su propio viaje
escondido en la neblina de los horarios.
Los que dormitan en las bancas despiertan
.........asustados,
aunque las pesadillas sean un privilegio
de los que abastecen los oídos y el tedio de
.........los psicoanalistas
en consultorios asépticos como el algodón
.........que tapa
la nariz de los muertos.
En las filas los pobres asumen un aire grave
que une temor, impaciencia y sumisión.
¡Qué grotesco son los pobres! ¡Y cómo
.........molestan sus olores aun a la distancia!
No tienen la noción de los conveniente, no
.........saben portarse en público.
El dedo sucio de nicotina restriega el ojo
.........irritado
que del sueño retuvo apenas la legaña.
Del seno caído e hinchado un hilillo de leche
escurre hacia la pequeña boca habituada al
lloriqueo.
En los andenes van y vienen, saltan y
aseguran maletas y paquetes,
hacen preguntas impertinentes en las
.........ventanillas, susurran palabras misteriosas
y contemplan las portadas de las revistas con
aire espantado
de quien no sabe el camino del salón de la
.........vida.
¿Por qué ese ir y venir? ¿Y esas ropas
.........extravagantes,
esos amarillos de aceite de dendé que lastiman
.........la vista delicada
del viajero obligado a soportar tantos olores
.........incómodos,
y esos rojos chillantes de feria y parque de
.........diversiones?
Los pobres no saben viajar ni saben vestirse.
Tampoco saben vivir: no tienen noción del
.........confort
aunque algunos de ellos tengan hasta televisión.
Verdaderamente los pobres no saben ni morir.
(Tienen casi siempre una muerte fea y de mal
.........gusto)
Y en cualquier lugar del mundo molestan,
viajeros inoportunos que ocupan nuestros
.........lugares
aun cuando vayamos sentados y ellos viajen
.........de pie

Ledo Ivo, de La noche misteriosa

Lectura poética